Si nuestro perro no bebe agua, es un signo que no debe pasarse por alto.
Normalmente, los dueños de los perros confiamos en el propio instinto de supervivencia del animal, por lo que dejamos a su elección el acto de beber agua cuando le apetezca.
Pero hay ocasiones en las que si el perro no bebe agua es por un problema de salud ante el cual hay que actuar de inmediato.
Si un perro deja de beber agua corre el peligro de deshidratarse.
SI el perro no bebe agua, lo primero que debes hacer es llevarle al veterinario para que identifique la causa de su inapetencia. Existen enfermedades que hacen que el perro pierda las ganas de beber agua como por ejemplo la rabia, el moquillo, problemas dentales, llagas e incluso el estrés.
Es muy importante identificar la causa para aplicar el tratamiento que más convenga a nuestra mascota lo antes posible. Si el motivo de que nuestro perro no beba agua es un problema de salud, cuanto antes se solvente, antes volverá a hidratarse por sí mismo el animal.
Si detectas que las encías de tu perro están demasiado secas o que al pellizcarle la piel, ésta no vuelve rápidamente a su forma original, pueden ser signos de que tu mascota se está deshidratando. El veterinario, para cuidar la salud de tu mascota, aplicará la forma más adecuada para que el animal se hidrate.
Mientras tanto, nosotros mismos podemos intentar algunos trucos en casa para hacer que nuestro perro se hidrate. Para ello:
- Coloca recipientes con agua fresca en varios rincones de la casa para que tenga acceso a ella en cualquier estancia por la que el perro pasee.
- A los perros les encanta lamer objetos. Puedes probar a darle cubitos de hielo para que los lama.
- En los recipientes con comida añade un poco de agua a la misma.
- Si el perro no bebe agua, otro truco que puedes utilizar es añadirle azúcar, ya que a los perros les suele atraer los sabores dulces.
- Si aun así, tu perro se resiste a beber agua, intenta mojarle el hocico para que se lo lama o vierte gotas de agua entre sus dientes.